Las aplicaciones de los drones desde el punto de vista civil son cada vez mayores. Agricultura, emergencias, ingeniería civil, patrimonio, medio ambiente… y por supuesto para la obtención de cartografía base en el diseño de estudios urbanísticos y paisajísticos, abarcando desde la producción cartográfica tradicional hasta el desarrollo de un urbanismo más sostenible.
La cartografía base requiere de medidas precisas. Y se basa fundamentalmente en el trabajo de la topografía para obtener la información necesaria, que posteriormente se plasma sobre el mapa.
¿Por qué el uso del dron para cartografía?
En el uso de drones para la obtención de cartografía base en procesos de estudios urbanísticos y paisajísticos influyen dos aspectos fundamentales. Por un lado, la necesidad de obtener una información exacta. Por otro lado es preciso que esa información se obtenga de manera rápida. Un dron permite conjugar ambos aspectos y son una herramienta eficaz en la gestión de un entorno urbano.
Pueden generar un archivo de ortofotografías y/o cartografía vectorial, donde se puede comprobar la dinámica de un territorio. Y además, los productos obtenidos constituyen una excelente base cartográfica donde poder interpretar, identificar y localizar elementos de interés en la gestión urbanística de una ciudad. A ello se une una tercera razón. La cartografía con drones es capaz de generar mejores resultados con menor coste.
Las aplicaciones a nivel urbanístico y paisajístico del uso de drones son muy variadas:
- Controles de calidad de productos cartográficos.
- Levantamientos fotogramétricos para la actualización de la cartografía municipal.
- Producción de cartografía de determinadas zonas del municipio.
- Controlar infracciones urbanísticas.
- Control de la calidad del aire y del agua.
- Detección de contaminación lumínica.
- Mantenimiento de zonas verdes.
- Análisis de eficiencia energética de edificios.
¿En qué consiste el proceso de utilizar el dron para cartografía?
- Obtención de la información. En primer lugar el vuelo de dron permite obtener los datos. El dron, ayudado con un GPS, sobrevuela el terreno y la cámara que incorpora va tomando imágenes. Son imágenes de una gran resolución espacial y temporal. Este tipo de fotografías permite medir, calcular superficies, perímetros o longitudes. Además, estas ortofotografías no tienen la deformación propia que generan las lentes de las cámaras y la distancia al terreno.
- Interpretación de los datos. El segundo paso es el procesamiento de las imágenes obtenidas en el vuelo del dron. Esas fotografías se incorporan a un software específico que las analiza. En este proceso se obtienen los modelos 3D y ortomosáicos. Gracias a los avances tecnológicos, la precisión de estos modelos es muy exacta. Además, mediante programas SIG (Sistemas de Información Geográfica) es posible tratar los resultados para poder medir coordenadas, distancias, áreas, e incluso volúmenes. Y es posible generar curvas de nivel, realizar perfiles, y elaborar MDE (Modelo Digital de Elevaciones).
Cartografía en Gandía
Como podemos ver en la siguiente fotografía, aquí tenemos a nuestro compañero utilizando las dos herramientas, dron y Gps, para obtener los datos de un estudio cartográfico en Gandía (Valencia).
Para Global Mediterránea & Geomáticia la conservación del patrimonio urbanístico y el mantenimiento de las áreas verdes son actividades de importancia en la planificación de un territorio urbano. Los métodos tradicionales de cartografía suelen tener elevados costos y períodos de tiempo relativamente largos. La utilización de drones para estudios urbanísticos y paisajísticos permite obtener esa información de manera más eficaz, rápida y económica. Y así se puede evaluar la evolución del urbanismo y ejecutar acciones de protección y mejora.
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